
El servidor de datos más verde del mundo está donde menos me lo podría esperar. Justo debajo de la catedral de Helsinki. Para ser más exactos, se encuentra a unos 30 metros bajo tierra dentro de un antiguo refugio de guerra.
Lo que las compañías finlandesas Academica y Helsingin Energia han hecho es realmente interesante. Lo primero es que no utilizan energía para refrigerar el centro de datos sino que se aprovechan diréctamente del agua del mar, que evidéntemente en Finlandia debe de estar lo suficientemente fría.